El Tottenham es el equipo de moda en la Premier, ganar en menos de una semana a Chelsea y Arsenal no esta al alcance de cualquiera, y menos si vienes de perder una semifinal de F.A.Cup (en 120 minutos) ante el Portsmouth que veías prácticamente ganada antes de jugarla. Y es que, en estos spurs hay dos nombres que están siguiendo una trayectoria similar, y que han ayudado a que las innumerables lesiones no se notaran tanto, son Gareth Bale y David Bentley.
Ambos llegaron con fama de jugadores muy buenos, y en sus primeros partidos ilusionaron, pero entre otras cosas, las lesiones y la competencia les dejo fuera, perdieron su sitio y la pasada temporada eran fijos en los partidos de reservas del equipo (junto a Pavlyuchenko), pero en los del primer equipo apenas aparecían. Sin embargo, esta temporada han vuelto tal y como se les esperaban, ayudando a los yids a pelear la 4ª plaza, sin que la plaga de lesiones se note.
De Bale se ha hablado mucho esta semana, su estado de forma es envidiable y ya suena para irse a los grandes de Europa, pero sus inicios en el norte de Londres fueron difíciles, ya que hasta esta temporada (2 años y un mes después de llegar) no había ganado ningún partido en la Premier League, la maldición la rompió con el 5-0 al Burnley. Este dato, aunque es demoledor viene con truco, ya que ha sufrido varias lesiones, que justamente han coincidido con las fases donde el equipo se recuperaba de los malos inicios de temporada (en los que sí estaba Gareth), además de perder la titularidad a favor de Assou-Ekotto.
La carrera del canterano del Southampton, como Theo Walcott, dio un vuelco esta temporada en Goodison Park, los spurs ganaban 0-2 cuando Moyes decidió sacar al campo a Seamus Coleman, un lateral irlandés de 17 años, que esa tarde volvió loco a Bale y dejo sus vergüenzas defensivas al descubierto (motivo por el cual nunca había sido fijo en los spurs, a pesar de su calidad), y el partido termino con empate a dos. Desde ese día, Bale empezó a corregir fallos, y no ha hecho otra cosa más que mejorar en las dos facetas en las que siempre se le ha criticado, su poca defensa y aprender a levantar la cabeza para buscar compañeros.
Y en el otro flanco spur, ha resurgido David Bentley que llego con la fama de ser el nuevo Beckham, pero que nunca ha terminado de funcionar, en su mayor parte porque tenía al mejor jugador del equipo, Aaron Lennon, como competencia directa. Ahora en un equipo donde juega Peter Crouch, el ex-gunner debe ser pieza casi fija para aprovechar las posibilidades que da el gigante de la cantera spur.
Aunque a diferencia de Bale, los problemas de los que se le acusaban eran tanto dentro como fuera del campo, por lo que la vuelta al nivel que demostró en el Blackburn Rovers ha sido más sorprendente, ya que los roces con Harry han sido varios y su marcha del equipo ha estado siempre como “trendtopic” cuando se abrían los mercados de fichajes.
Estos son las actuales bandas del Tottenham que se las verán hoy con Gary Neville y Patrice Evra, y que aunque son las suplentes (dudo que lleguen a quitarle el puesto a Lennon y Modric), han demostrado el banquillo de lujo que hay en White Hart Lane.
4 Comentarios
Saludos!
Pero claro, bendito problema el de Redknapp de contar con esos cuatro cracks en las bandas.
Saludos