Nos apasiona la Champions League, en muchas ocasiones hemos hecho hincapié en lo bien organizada que está y que los mejores jugadores del mundo están ahí... y si no lo están, quieren estar.
También hemos comentado alguna vez, que víctima de la fijación de la UEFA en potenciar esta competición, perdimos una siempre interesante Recopa y debilitó muchísimo el nivel de la Copa de la UEFA (eso sí, se han movido para reactivar esta competición que ya os explicaré en otra entrada)
Pero este año, no sé si a vosotros os da la misma sensación, la competición de la UEFA ha dado la imagen de ser tomada más en serio. Después del sorteo de los cuartos de la Champions, se hizo lo propio con la UEFA y si nos paramos a mirar vemos que el Shakthar, el Olympique de Marsella, el Dinamo de Kiev y el Werder Bremen (la mitad de los que siguen en liza) han jugado la Champions, si bien es cierto que entraron en rondas más avanzadas, se han tomado en serio esta guinda.
Equipos como el Sevilla (bicampeón no hace mucho), el Milan, el Valencia, o el Zenit han caído de manera sorpresiva cuando se contaba con ellos para estar en estas rondas... pero dejando paso a un PSG con muchas ganas de volver por donde solía, al Hamburgo que está dando guerra en la Bundesliga, al Udinese que también merece mención especial por su trayectoria europea en los últimos años y al "nuevo rico", al Manchester City, que si bien hace muchos, pero que muchos años que no celebran más que los ascensos, la entrada de dinero le ha puesto en la picota con Robinho y Elano (entre otros jugadore interesantes) a la cabeza.
Y claro, viendo todo esto, me viene a la cabeza una idea. El cambio de mentalidad que ha sufrido esta competición desde su modificación hasta ahora. Lejos quedan los tiempos en que potentes equipos que, por ejemplo, subcampeonaban en su Liga, fueran quemando etapas hasta los cuartos o semis de la UEFA, poco a poco se ha ido transformando en una competición que ha servido de plataforma de lanzamiento para equipos, con todos mis respetos, de segunda línea (eso sí, por culpa del nuevo formato Champions) hacia el reconocimiento continental y a escribir con letras de oro capítulos en sus historias particulares. Para mí los dos claros ejemplos son el Sevilla, que como mencionaba antes, ganó dos títulos de manera consecutiva antes de su presentación en Champions y más recientemente el Zenit, que nos regaló una fantástica participación el año pasado y que este año dio un pasito más participando también en Champions.
Por ello, recibo con dudas un nuevo cambio de formato del torneo, que veremos si aligera de partidos intranscendentes e incentiva de alguna manera a los equipos para que la tomen más en serio.
8 Comentarios
Si para la Copa ya se demanda que el ganador vaya a Champions en lugar de a la UEFA, ¿Por qué no plantear que el campeón de UEFA vaya a Champions? o que los cuatro semifinalistas tengan opciones de entrar en Champions entrando en eliminatorias previas. Es la única manera de que equipos como Sevilla, Valencia o Milan presten más atención a esta competición.
Un saludo
Saludos
Saludos
Saludos!
Creo que con lo de equipos mediocres te equivocas en la definición. Más bien son equipos sin historia, como el Zenit el año pasado. Vale que tuvieran un apoyo económico importante, pero montaron un equipo lleno de talentos desconocidos para el gran público.
En el fútbol las finales se las llevan los grandes o los equipos que reunen una buena generación.
Saludos
http://deparadinha.blogspot.com
Reconozco que a veces el fútbol inglés me aburre.
Saludos Lama!