Toco y me voy: Román volvió a casa

Uno de los puntos más calientes del fin de semana era ver el primer partido de Riquelme con Argentinos Juniors tras su salida de Boca. Al que conocemos como 'El último enganche' cerró su etapa con la azul y oro de una manera, tal vez, poco acorde a su paso por el club para hacerlo, además, en un camino de vuelta a casa, con Argentinos Juniors, pero en una categoría poco acorde con su calidad técnica: la Primera Nacional B.
Para aderezar más el menú del día, el rival fue Boca Unidos, una más que curiosa coincidencia que seguro que facilitó alguna previa y más de una crónica post partido que se centrara en el desempeño del que fue 10 de Barcelona y Vila-real en Europa.

Sebastián Giovini, consciente de lo que puede significar tener a un futbolistas de las condiciones de Riquelme en el equipo en una categoría tan dura como la B, presentó un equipo muy armado para que su nueva estrella luzca: centrales que anticiparon mucho (en una línea muy adelantada), un Cristian Ledesma como 5 (que también 'debutaba' por segunda vez con Argentinos) que barrió muy bien por delante de la defensa delante durante los primeros veinte - treinta minutos de partido presentando una primera salida más o menos limpia y bastante equilibrio sin balón.
Y por delante de Riquelme, hombres rápidos y ninguna referencia de área. Un planteamiento interesante con la intención de dejar mucho espacio entre Román y la portería de Matías Garavano.


Este planteamiento en el primer tiempo dio el control de la posesión a Argentinos pero Boca Unidos esperaba algo muy centrado en potenciar las virtudes de la nueva estrella de Argentinos y se encargó de que no tuviera espacios en zonas peligrosas para pensar e, incluso, intentaron calentarle y sacarle del partido. Con los ataques en estático a un ritmo muy lento, los visitantes tuvieron las mejores ocasiones del primer periodo.

En la reanudación, sin goles y sin muchas ocasiones que indicaran que estaban al caer, pintaba a más de lo mismo hasta que Nagüel dejó su sitio a Guerreiro. Se sacrificaba desborde por fuera para meter a un hombre de área y el juego de Argentinos comenzó a ver como se finalizaba jugadas.
Pero fue en una contra a partir de un córnero donde llegó el momento mágico de la noche. De hecho es digno de estudio la cantidad de saques de esquina que acabaron en contraatque peligroso.

 
 
El gol del hombre del día, lejos de romper la tensión con la que había jugado Argentinos hasta ese momento, fue empujando poco a poco al equipo ha retrasar su posición y dar más oportunidades de encontrar un gol merecido a Boca Unidos que encontró en la figura de Gabarini al hombre que les privó de aguar el segundo debut de Román con Argentinos.

Un partido de guión ya visto en otros encuentros donde una figura acaparaba tanto la atención que cohibió a sus compañeros y presentó un escenario demasiado cómodo a un rival que buscó la contra y la encontró con demasiada facilidad.
Si este va a ser el camino que se va a encontrar Argentinos y Riquelme en su camino por la Primera B, queda mucho trabajo en cuanto a 'limpiar' el camino para que las intervenciones del 10 sea más determinantes en cuanto a los automatismos del equipo y no tanto en cuanto a su relevancia en el marcador.


Bonus tracks


Publicar un comentario

0 Comentarios