Futbolistas de Leyenda: Marc Overmars


Un viernes más añadimos un cromo más a nuestro álbum de jugadores que por un motivo u otro, figuran en la memoria colectiva de Uno o Dos Toques. Hoy es turno para uno de los jugadores más eléctricos de los que tuve oportunidad de ver, el extremo holandés Marc Overmars, uno de los últimos extremos puros que han ido sobreviviendo a la 'muerte' de este puesto en el fútbol moderno.

¿Cómo jugaba Overmars?

Diestro natural pero con capacidad de golpear casi igual de bien con la zurda, era un fijo en la banda, gracias a esto, tanto derecha inicialmente como izquierda, donde más brilló ya que podía trazar diagonal y buscar un disparo como apurar y centrar con bastante precisión. Dados los sistemas que solían usar los equipos por los que pasó, siempre con extremos u hombres de banda con caracter marcado, nos quedará la duda de haberle visto funcionar como un segundo punta más a menudo.

La velocidad fue su marca. Un jugador bajito pero potente y tremendamente veloz provocaba que el desborde y la verticalidad aparecieran comúnmente en la descripción de su juego. Pero Overmars era algo más que un jugador físico, supo absorver conceptos tácticos con el paso del tiempo para dosificar y hacer más útiles para el equipo sus carreras y por supuesto, tenía un repertorio técnico más que digno, lo que le permitía ya no sólo habilitar a sus compañeros con acierto, sino definir con la clase de un delantero de sangre fría en más de una ocasión.

Pero como tantos otros jugadors rápidos, tuvo su cruz en las lesiones. La segunda etapa de su vida profesional fue común verle con lesiones musculares que tornaban irregular su rendimiento, y cuando estaba disponible para jugar, no lo estaba con la confianza necesaria como para probar a hacer cosas.

Clubs

Títulos

  • 1 Copa Intercontinental (1995)
  • 1 Supercopa de Europa (1995)
  • 1 Copa de Europa (1995)
  • 3 Supercopas (93, 94 y 98)
  • 4 Ligas (94, 95, 96 y 98)
  • 2 Copas (93 y 98)



Fue uno de los jugadores emblemáticos de la selección holandesa durante los noventa. Disputó los Mundiales de 1994 y de 1998 junto a la Eurocopas de 1996, 2000 y 2002 y fue destacado en todos ellos. Coincidió con otros grandes holandeses de la época por lo que siempre eran candidatos a la victoria final, quizás el fútbol les debiera algo a nivel de selecciones.

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