En la década de los sesenta y de los setenta creció y se hizo, por los escándalos, público el fenómeno de las groupies: esas jóvenes que llevaban el fanatismo por artistas hasta límites insospechados con el único objetivo de tener relaciones sexuales con ellos, visualizando este acto como la culminación de todas las aventuras que por ellos pasaban.
Luego la cosa se podía frenar ahí o seguir en busca de engatusar definitivamente al cantante de turno para convertirse en una mantenida o sacarle todo lo que pudiera. Independientemente de cómo acabara la historia, los capítulos sexuales tenían una importancia profunda en el inicio, nudo y final de cada historia de las groupies.
El fútbol, siempre ligado a lo que la sociedad vive, también tiene sus "groupies", si bien, a mi humilde entender, son más casposas y pierden ese halo de descontrol y vida llevada al extremo que unas décadas como las anteriormente citadas pueden proporcionar. Aquí en España, por ejemplo, dando un repaso a la trayectoria amorosa de jugadores de la talla de Sergio Ramos o Iker Casillas podemos ver el nivel. Eso sí, Núria Bermúdez y Victoria Beckham son el ejemplo perfecto para poner cara y cuerpo a estas chicas.
Pero una vez más, tenemos que viajar a Argentina para ver la auténtica evolución y adaptación de las groupies al mundo del fútbol: las botineras.
Son jóvenes de una fisionomía de ensueño con aspiraciones a colocarse en el mundo del modelaje o de la televisión y que ven en los jugadores de fútbol una buena herramienta de promoción (bueno, también hay casos de amor verdadero) ya que les garantizan portadas o espacios en revistas o programas rosas sin mucho esfuerzo.
Es tal el fenómeno de las botineras (cuentan que hasta el propio Maradona tuvo algunas) que incluso "ya trabajan con la cantera" yendo a los hoteles de concentración de las selecciones inferiores a ver "qué pueden pescar"... imaginaos que seguramente algunos jugadores tengan antes su pareja botinera antes que el debut con el primer equipo.
Incluso, para mí esto es lo más grande, ha conseguido que dos jugadores antagónicos como lo son el "Cacha" Forlán y Maxi López (sí, nuestro Massi) sean familia, cuñados concretamente, debido a que ambos fueron seducidos por las hermanas Mara.
Luego también tenemos el caso contrario, por si su fútbol no fuera suficiente, "Kun" Agüero decidió tirar para adelante su relación con la hija de Maradona (marcada a hierro con un nieto para Maradó) y así asegurarse el beneplácito eterno de Diego, más ahora que es el DT de Argentina.
