Siempre que se inicia un gran torneo, cuando se sortean los grupos o las eliminatorias, me da por pensar en cómo modificaría esa competición. No sé, es una cosa rara pero me gusta perder el tiempo pensando cosas así. De este modo, cuando me iba enterando de como se iban conformando los grupos de la Champions, las ideas comenzaron a florecer en mi cabeza.
Esta competición, con más de cincuenta años de vida, ha sufrido muchos cambios desde que el Real Madrid alzara el trofeo (que por aquel entonces era el mismo que se usó más tarde para la Eurocopa de Naciones) en su primera edición en 1956: más equipos, sedes fijas para las finales, inclusión del sistema de liguilla... y sobre todo en los noventa, cuando la UEFA, se fijo entre ceja y ceja potenciar la competición para hacerla atractiva al aficionado (que a la vez es consumidor) y beneficiosa para los clubs (más allá del honor de levantar el trofeo al finalizar el año). Un horario fijo, una sponsorización elegante y cuidada, unas producción televisa de calidad... en fin, todo lo que se necesita para dar lustre a una marca que sin lugar a dudas es la estrella de la corona de los torneos de clubs.
Pero el motivo que me ha empujado a escribir esta entrada va más allá de alabar la competición o analizar los grupos o lo que nos ha ido mostrando el torneo en los partidos que se han disputado ya, porque me imagino que a estas alturas los conoceréis (a través de las fantásticas entradas que redacta Jm por ejemplo) e incluso habréis disfrutado de algún debate por el morbo con el que fueron saliendo las bolitas de los bombos o los pequeños detalles que ha ido dejando cada choque. El tema voy, va de reflexionar, de debatir a raíz de una idea que ronda en la cabeza de los mandamases de los clubs más poderosos del Viejo Continente: la creación de una Super Liga europea.
Esto está haciendo que la UEFA haya hecho pequeñas variaciones sobre todo en la manera de calificar a los clubs participantes y que la deja en una posición de indefinición: no sabemos si la UEFA quiere seguir con el proyecto de dirimir al mejor equipo de Europa enfrentando a sus campeones o crear un torneo en el que los mejores equipos del continente luchen entre ellos por el honor de ser el mejor.
¿Por qué digo esto? Todo nació cuando ví el bombo 4 del sorteo: el único que estaba compuesto íntegramente por campeones de liga, pero salvando al Wolfsburgo, de ligas menores. Sin embargo tenemos equipos como el Olympique de Marsella, que lleva casi veinte años sin ganar nada pero que es un casi un clásico del torneo. Obviamente, cuenta con jugadores de mayor calibre que el campeón de Hungría, pero su presencia (ojo, no tengo nada contra los franceses, sólo los uso para argumentarme) atenta contra el propio nombre del torneo.
Así, para mí, la UEFA está a medio paso entre lo que era el torneo y lo que quieren los clubs, un torneo entre los más pudientes.
Y todo esto, me plantea una duda que quiero que me ayudéis a solucionar: ¿Debe la UEFA romper de una vez y organizar un torneo en el que estén los mejores equipos de Europa? ¿Dejar los torneos locales como "segundas divisiones europeas"? O el más difícil todavía, ¿recuperar el espíritu de la competición y que sólo los campeones tomen parte de ella?
Para mí, la primera opción, sería una estocada mortal para el resto de no habituales en Europa. Llegar a la máxima competición nacional es para muchos equipos una inyección económica que le puede ayudar unos años a mantener el ritmo autodestructivo que tiene ahora mismo el fútbol. Si los grandes se marchan, las primeras divisiones se devaluarían tanto que quizás equipos humildes verían recortada su esperanza de vida de manera espectacular.
Yo soy un firme defensor de pulir una Champions en la que sólo sean campeones los que tomen parte, pero soy realista y es imposible retomar el torneo de este modo ¿Os imagináis una Champions sin el Madrid, el Chelsea, el Bayern o la Juve? Es más, veo a lo lejos de esta hipotética decisión un cisma en el fútbol europeo sin precedentes. Sería tal el impacto económico y mediático que no me imagino las consecuencias.
Así cuando me paro a pensar en estas cosas, siempre pienso lo mal que hizo la UEFA en cargarse la Recopa y en abrir tanto la Champions... primero por cargarse un torneo mítico como el de los Campeones de Copa y segundo porque dejó en coma a la UEFA, la hermana pequeña de estas competiciones y que por mucha reforma que se le haga con liguillas y más dinero, la falta de equipos potentes hasta las últimas rondas la torna una competición que genera pérdidas económicas a sus participantes.
4 Comentarios
Tampoco me extrañaría una liga entre los grandes de Europa "a la MLS". Es decir, sin ascensos ni descensos.
El futuro dirá.
Me encantaria ver un torneo con los mejores 14 equipos del continente pero la Champions es especial, este edicion me esta gustando mucho, hay variedad de equipos, paises, estadios, mucho atractivo futbolistico y del ambiente. Aunque claro, como todo en la vida, es mejorable.
Saludos!
El Balón Europeo
Claro que eran otros tiempos en los que no estaba Platini al frente, que lo veo como un comunista hippie en esto del fútbol. Pero sí, creo como Ariel, que al final todo desembocará en una superliga europea a poco que los clubs se organicen y aprieten a la UEFA otra vez... el problema es como digo, las ligas nacionales y las otras competiciones europeas.
Saludos